Siento miedo. Pero esta vez no es el tipo de miedo que parece paralizar mi corazón y me hace perder la razón. 
Hoy siento el tipo de miedo que inunda de agua mis ojos, porque comienzo a sentir que nunca había sido tan feliz.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Renascence

Vive

Dos de junio